Diez días llevan los niños en casa de su madre. Diez días en los que no han hecho ni media hora de deberes. Diez días en los que ni siquiera han leído. Y eso que, salvo el fin de semana, estaban en casa.
Cuando lleguen con nosotros, tendrán acumulados los de la quincena pasada y los de la nuestra.
Pero, claro, como ella les dice que ya trabajan con su padre y que, mientras estén con ella, lo que tienen que hacer es disfrutar...
Cuando lleguen con nosotros, tendrán acumulados los de la quincena pasada y los de la nuestra.
Pero, claro, como ella les dice que ya trabajan con su padre y que, mientras estén con ella, lo que tienen que hacer es disfrutar...